Y por aquí que andamos de nuevo...
(Fotografía: Cruz sobre la Sierra de Alfacar (1.525 m.a.), conocida como la cruz "de los Maestros", la misma que fue levantada aquí hace unos 80 / 90 años, y que ha sido recientemente restaurada por un grupo de vecinos/montañeros-senderistas de este tan serrano pueblo granadino. Los mismos que de forma desinteresada y con los permisos correspondientes, tuvieron que cargar, durante su último tramo, con todos los materiales necesarios a sus espaldas)
*
*
Paisaje que, desde allá arriba, nunca te dejará indiferente....
*
Desde estas montañas el verde, como que sigue siendo verde, amplio amigo, verdadero, pasto de la mirada; al alcance de todos los sueños, mortales e inmortales. El azul, a la vista está, como siempre, infinito, necesario, oxigenado, como anfibio y fiebre del agua. El agua, ¡ay el agua…! Invisible, infiltrada, fiel a su cita. Al abrazo y eco de esa decena de fuentes que la reclaman; como por ejemplo, la de Aynadamar: la que brota, entre sonrisas y lágrimas, entre el pasado y el peso de la montaña; como infinito presente, frontera entre la piedra y el habla.
*
Así que…¡arriba ese verde, y vaya por nuestras montañas!
**
Desde estas montañas el verde, como que sigue siendo verde, amplio amigo, verdadero, pasto de la mirada; al alcance de todos los sueños, mortales e inmortales. El azul, a la vista está, como siempre, infinito, necesario, oxigenado, como anfibio y fiebre del agua. El agua, ¡ay el agua…! Invisible, infiltrada, fiel a su cita. Al abrazo y eco de esa decena de fuentes que la reclaman; como por ejemplo, la de Aynadamar: la que brota, entre sonrisas y lágrimas, entre el pasado y el peso de la montaña; como infinito presente, frontera entre la piedra y el habla.
*
Así que…¡arriba ese verde, y vaya por nuestras montañas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario